domingo, 6 de diciembre de 2009

CONTEXTO Y ENFOQUE DE SUSTENTABILDAD EN EL AMBITO SOCIAL



El concepto social de sustentabilidad es de orientación humana y busca mantener la resiliencia de los sistemas sociales y culturales y su capacidad de soportar choques o impactos. Una equidad mayor y la reducción de conflictos destructivos resultan aspectos trascendentes en la aproximación social a la sustentabilidad. La conservación de la diversidad cultural y el capital étnico-cultural-religioso a través de las diferentes comunidades y el mayor uso del conocimiento de las prácticas de sustentabilidad de las culturas del mundo, particularmente de las menos dominantes. La sociedad moderna debe auspiciar la participación e incorporar el pluralismo y las raíces culturales de los pueblos en marcos de decisión más efectivos, para mejor alcanzar su desarrollo sustentable.

CONTEXTO Y ENFOQUE DE SUSTENTABILIDAD EN EL AMBITO POLITICO



El debate entre los dos enfoques no es solo teórico, ha tenido también implicaciones en el diseño y operación de instrumentos en política económica ambiental. La sostenibilidad débil representa la concreción de los principios neoclásicos y su base fundamental es el postulado de mantener el stock de capital natural. La herramienta neoclásica por excelencia ha sido el análisis beneficio costó, que tiene por objetivo alcanzar el excedente social de las decisiones públicas. Así mismo, se puede mencionar la corrección al Sistema de Cuentas Nacionales, el cual ha sido fuertemente criticado por no considerar la degradación de los recursos naturales y no considerar gastos de protección al medio ambiente. Por ello, se han propuesto índices, como el PIB verde, el Ingreso Nacional Sostenible (INS) y el Índice de Bienestar Económico Sostenible (IBES), este último con aplicaciones en Austria, Chile, Dinamarca, Alemania, Holanda y Reino Unido (Castañeda, 1997).
Una de las principales críticas que se hace a la sustentabilidad débil y a los indicadores utilizados para su medición es el obstáculo, no solo técnico sino conceptual, para medir económicamente el capital natural. Dada la complejidad de los sistemas ecológicos, muchas de sus funciones se desconocen o se subvaloran, y para otras funciones no existe un mercado. Por tanto, se deben asumir como índices que proporcionan información sobre los sistemas, pero no son definitivos del estado del mismo, ya que no permiten visualizar la compleja relación entre economía y ambiente.
La otra cara de la moneda es la sustentabilidad fuerte, que viene a concretar la defensa de los economistas ecológicos. Para este enfoque el capital económico y el capital natural no son sustitutivos sino complementarios, pues el capital natural provee funciones que no pueden ser reemplazadas por el capital económico. La condición previa para la sostenibilidad es la de mantener las funciones ambientales, lo cual significa conservar la capacidad de los procesos naturales y sus componentes para proporcionar bienes y servicios ambientales que puedan ser identificados como stock o flujos de capacidad de carga, los cuales son proporcionados por las diferentes formas de capital natural (Falconí, 2002).
La desmaterialización se ha constituido como uno de los principios fundamentales dela sustentabilidad fuerte. Se le asocia con la noción de que el crecimiento económico, calculado por uno de sus indicadores estándar, el producto interno bruto por habitante, provoca una menor presión ambiental o uso de los recursos en el tiempo. Así, se supuso que en la medida que aumenta el ingreso, en un momento dado se emitiría menor cantidad de SO2 y CO2, o se produciría una menor cantidad de basura por habitante. Martínez-Alier (1995) comenta: los ricos son más ecológicos o los pobres son “muy pobres para ser verdes”.
Los partidarios de la desmaterialización de la economía, especialmente el Banco Mundial a partir de su informe sobre el Desarrollo Mundial en 1992 (BM, 1992) argumentan, en el ámbito conceptual y empírico, que hay una tendencia descendente tanto relativa como absoluta en el uso de materiales y energía a medida que las economías crecen. En esta dirección se inscriben los llamados a incrementar la eficiencia de materiales y energía por un factor de 4 y un factor de 10, respectivamente, por parte del Instituto Wuppertal de Alemania (García, 2002; Schmidt-Bleek, 1994). No obstante, la relación entre variables físicas y económicas sigue siendo un problema. En este sentido debe examinarse el volumen global de materiales y energía y su intensidad de uso, así como los flujos de intercambio en el nivel mundial

CONTEXTO Y ENFOQUE DE SUSTENTABILIDAD EN EL AMBITO ECONOMICO



Este enfoque es la elaboración de un concepto de desarrollo sostenible en términos económicos y puede ser argumentado a partir del Informe Bruntland que dice lo siguiente:
“Vemos la posibilidad de una nueva era de crecimiento económico que ha de fundarse en políticas que sostengan y amplíen la base de recursos del medio ambiente; y creemos que ese crecimiento es absolutamente indispensable para aliviar la gran pobreza que sigue acentuándose en buena parte del mundo en desarrollo”
El crecimiento económico es visto como condición para proteger a la naturaleza. La idea de inversión, a fin de lograr un desarrollo sostenible, asegura la compatibilidad del crecimiento económico y el desarrollo con la protección del medio ambiente. El crecimiento económico y el fortalecimiento de la competitividad se reflejarán en inversión privada en la naturaleza y la biodiversidad y un descenso en términos absolutos de las emisiones peligrosas para el medio ambiente como resultado del desarrollo tecnológico de la empresa privada. Esta concepción apuesta por un “crecimiento inteligente” de la economía suponiendo que disminuye la presión general sobre el medio ambiente. Siendo así, el desarrollo sostenible será consecuencia del crecimiento económico.
Se sostiene que es natural que la humanidad luche por el continuo crecimiento de la producción y el consumo. La idea básica es que el crecimiento económico es una condición necesaria para aumentar la protección y la renovación medioambiental, pues creará inversión privada interesada en proteger los ecosistemas. También el crecimiento económico se considera vital para el desarrollo sostenible del mundo, porque sólo así se podrá distribuir la riqueza a los que hoy son marginados. Mientras no exista crecimiento no podrá haber equidad.

CONTEXTO Y ENFOQUE DE SUSTENTABILDAD EN EL AMBITO ECOLOGICO



El término desarrollo sustentable reúne dos líneas de pensamiento en torno a la gestión de las actividades humanas: una de ellas concentrada en las metas de desarrollo y la otra en el control de los impactos dañinos de las actividades humanas sobre el ambiente.
De acuerdo a lo establecido en el artículo 3° de la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente, en la fracción XI se define al desarrollo sustentable como “el proceso evaluable mediante criterios e indicadores de carácter ambiental, económico y social que tiende a mejorar la calidad de vida y la productividad de las personas, que se funda en medidas apropiadas de preservación del equilibrio ecológico, protección del ambiente y aprovechamiento de recursos naturales, de manera que no se comprometa la satisfacción de las necesidades de las generaciones futuras”.
El inventario del Ciclo de Vida (ICV) es una herramienta para predecir la carga ambiental de un producto o Servicio en particular, es como un estado de cuentas o un balance de todas las entradas, en términos de recursos y energía; salidas en términos de emisiones al agua, aire y suelo. El inventario de ciclo de vida utiliza varias estrategias que sirven para evitar o minimizar la contaminación ambiental, como el reciclado de materiales, el incinerado, compostaje, utilización de rellenos sanitarios, envases biodegradables, etc. Entre los materiales que se pueden reciclar están el metal, vidrió, cartón, etc.
La incineración es otra de las estrategias que utiliza el análisis del ciclo de vida, este método se utiliza frecuentemente para eliminar la basura inorgánica. El compostaje es otra de las estrategias que utiliza el análisis del ciclo de vida y para el cual se utiliza basura orgánica como son los residuos de alimentos, pañales desechables, y otros restos orgánicos para nutrir a los cultivos.
El relleno sanitario es otra forma de disponer de la basura orgánica y de esta forma minimizar la contaminación ambiental.

TRATADO DE KIOTO



El Protocolo de Kioto sobre el cambio climático es un acuerdo internacional que tiene por objetivo reducir las emisiones de seis gases provocadores del calentamiento global: dióxido de carbono (CO2), gas metano (CH4) y óxido nitroso (N2O), además de tres gases industriales fluorados: Hidrofluorocarbonos (HFC), Perfluorocarbonos (PFC) y Hexafluoruro de azufre (SF6), en un porcentaje aproximado de un 5%, dentro del periodo que va desde el año 2008 al 2012, en comparación a las emisiones al año 1990. Por ejemplo, si la contaminación de estos gases en el año 1990 alcanzaba el 100%, al término del año 2012 deberá ser del 95%. Es preciso señalar que esto no significa que cada país deba reducir sus emisiones de gases regulados en un 5%, sino que este es un porcentaje a nivel global y, por el contrario, cada país obligado por Kioto tiene sus propios porcentajes de emisión que debe disminuir.
Este instrumento se encuentra dentro del marco de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC), suscrita en 1992 dentro de lo que se conoció como la Cumbre de la Tierra de Río de Janeiro. El protocolo vino a dar fuerza vinculante a lo que en ese entonces no pudo hacer la CMNUCC.
Se estableció que el compromiso sería de obligatorio cumplimiento cuando lo ratificasen los países industrializados responsables de, al menos, un 55% de las emisiones de CO2. Con la ratificación de Rusia en noviembre de 2004, después de conseguir que la UE pague la reconversión industrial, así como la modernización de sus instalaciones, en especial las petroleras, el protocolo ha entrado en vigor.
Además del cumplimiento que estos países han hecho en cuanto a la emisión de gases de efecto invernadero se promovió también la generación de un desarrollo sostenible, de tal forma que se utilice también energías no convencionales y así disminuya el calentamiento global. Respecto de los países en desarrollo, el Protocolo no exige a bajar sus emisiones, aunque sí deben dar señas de un cambio en sus industrias.
El gobierno de Estados Unidos firmó el acuerdo pero no lo ratificó (ni Bill Clinton, ni George W. Bush), por lo que su adhesión sólo fue simbólica hasta el año 2001 en el cual el gobierno de Bush se retiró del protocolo, según su declaración, no porque no compartiese su idea de fondo de reducir las emisiones, sino porque considera que la aplicación del Protocolo es ineficiente (Estados Unidos, con apenas el 4% de la población mundial, consume alrededor del 25% de la energía fósil y es el mayor emisor de gases contaminantes del mundo 5 ) e injusta al involucrar sólo a los países industrializados y excluir de las restricciones a algunos de los mayores emisores de gases en vías de desarrollo (China e India en particular), lo cual considera que perjudicaría gravemente la economía estadounidense.

ESBOZO HISTORICO



Desde fines del siglo XVIII y principios del XIX, filósofos sociales y economistas como Tomas Malthus y David Ricardi comenzaron a preocuparse por las posibilidades de la Tierra para satisfacer las necesidades del hombre ante un crecimiento poblacional que, se anticipaba, excedería a las posibilidades del planeta para producir bienes económicos.
Sin embargo poco a poco estas preocupaciones fueron desplazadas por un optimismo fundado en las posibilidades prácticamente ilimitadas de un conocimiento científico y técnico en franca expansión. No se preveía por aquellos años algunas secuelas indeseables del crecimiento económico que hoy son evidentes, como la acumulación de desechos, la contaminación del ambiente, la pérdida de biodiversidad, el agotamiento de recursos naturales no renovables, etc.
Así se fueron modelando dos líneas de pensamiento divergente: La primera colocaba al hombre por encima de la naturaleza y del resto de las especies, y que dio lugar al paradigma productivo que conocemos como "Revolución Verde". La segunda corriente, se basa en una especie de ética naturalista, que valoriza el rol de todas las especies vivas y del ambiente, como factores de equilibrio natural. Esta corriente coloca en un primer plano al paradigma que hoy denominamos "Desarrollo sustentable".
En el concepto de desarrollo sustentable se engloban todas aquellas formas alternativas de subsistencia que son factibles en términos biológicos y económicos, consistentes con la preservación del ambiente y los recursos naturales, y equitativas para satisfacer necesidades de las generaciones actuales y futuras. Entonces debo sintetizar que la idea de desarrollo sustentable nos plantea una encrucijada vital: la de cubrir nuestras necesidades presentes sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer las propias. Creo que no es este precisamente un mensaje de bienvenida para nuestras sociedades de consumo a quienes se les recuerda, insistentemente, que los excesos de hoy alguien los tendrá que pagar mañana.

AGENDA 21



Programa 21 es un programa de las Naciones Unidas (ONU) para promover el desarrollo sostenible. Es un plan detallado de acciones que deben ser acometidas a nivel mundial, nacional y local por entidades de la ONU, los gobiernos de sus estados miembros y por grupos principales particulares en todas las áreas en las cuales ocurren impactos humanos sobre el medio ambiente.
Agenda 21 es una lista detallada de asuntos que requieren atención, organizada cronológicamente, 21 hace referencia al
siglo XXI. La palabra agenda, aunque de origen latino (plural de agendum) es un anglicismo en castellano; el término oficial adoptado por la ONU es Programa 21, aunque poco se usa a nivel mundial.
En los años 60 del pasado siglo XX, la comunidad científica comienza a alertar a las administraciones sobre los grandes problemas del planeta: pobreza, pérdida de biodiversidad y deterioro medioambiental. Se empiezan a hacer patentes las interrelaciones físicas e inevitables entre las actividades humanas y la naturaleza y que el medio ambiente, -la biosfera en la que vivimos- resulta ser un sistema complejo, dinámico, sinérgico e incierto y que existe una interdependencia mutua entre el ecosistema y el sistema socioeconómico que exige una mutua adaptación de ambos.
En 1968 Aurelio Peccei y Alexander King crean el Club de Roma para atender a los retos de esta nueva problemática. En 1972 sale a la luz el primer informe al Club de Roma elaborado por los Medows titulado
Los límites del crecimiento (The limits to growth) que, con sus aciertos, errores y críticas, es todo un aldabonazo en las conciencias de los dirigentes y de los estudiosos. Mediante la primera reunión mundial de 1972 sobre medio ambiente (Conferencia sobre el Medio Humano de Estocolmo), se comienzan a poner los cimientos para la más importante Cumbre de la Tierra que se celebraría 20 años más tarde en Río de Janeiro (1992). En esta Conferencia de Estocolmo sobre el Medio Humano de 1972, participaron 113 naciones y su Secretario General fue el Dr. Maurice Strong – que también lo sería de Río- “Antes de ella, relata el Dr. Strong, jamás un tema -en este caso, el medio ambiente- considerado prácticamente una novedad, fue llevado a un nivel tan alto de discusión”. Las conclusiones de esta Conferencia, posteriormente, en 1987, se recogieron en el Informe Brundtland, titulado “Nuestro Futuro Común”, dirigido por Gro Harlem Brundtland, ex-Primera Ministra de Noruega. Como resultado de esta Conferencia de Estocolmo se instauró el Programa del Medio Ambiente de las Naciones Unidas (PNUMA) y la ONU estableció en 1983 la Comisión Mundial sobre Medio Ambiente y el Desarrollo






DESARROLLO SUSTENTABLE



"El desarrollo es sustentable cuando satisface las necesidades de la presente generación sin comprometer la capacidad de las futuras generaciones para que satisfagan sus propias necesidades".
Gro Bruntland, 1987.
"Desarrollo agropecuario y rural sustentable es la administración y conservación de la base de recursos naturales y la orientación de los cambios tecnológicos e institucionales de tal forma que aseguren el logro y la satisfacción permanentes de las necesidades humanas para el presente y las futuras generaciones.” FAO, 1992.
Es decir, el desarrollo sustentable hace referencia al mejoramiento de técnicas productivas con el fin de satisfacer las necesidades de la población actual sin perjudicar el medio ambiente, recordando que el desarrollo del hombre depende directamente de los recursos naturales con los que cuenta el planeta tierra. La preservación de dichos recursos permitirá el aprovechamiento por generaciones futuras y resultaran indispensables para la posible habitación.

SUSTENTABILIDAD

El concepto de sustentabilidad se funda en el reconocimiento de los límites y de las potencialidades de la naturaleza, así como en la complejidad ambiental, inspirando una nueva comprensión del mundo para enfrentar los desafíos de la humanidad en el tercer milenio. Promueve una nueva alianza naturaleza-cultura fundando una nueva economía, reorientando los potenciales de la ciencia y de la tecnología, y construyendo una nueva cultura política fundada en una ética de la sustentabilidad —en valores, en creencias, en sentimientos y en saberes— que renueva los sentidos existenciales, los mundos de vida y las formas de habitar el planeta.

DESARROLLO

Se entiende como desarrollo, la condición de vida de una sociedad en la cual las necesidades auténticas de los grupos y/o individuos se satisfacen mediante la utilización racional, es decir sostenida, de los recursos y los sistemas naturales

MARCO CONCEPTUAL

OBJETIVO

El alumno elaborara una síntesis en la que se incluyan los conceptos y se sinteticen los antecedentes del desarrollo sustentable donde se manifieste la toma de conciencia sobre sus implicaciones económicas, políticas, sociales y ecológicas. Seleccionando los indicadores para el diagnostico ambiental en un ente económico.El alumno elaborara una síntesis en la que se incluyan los conceptos y se sinteticen los antecedentes del desarrollo sustentable donde se manifieste la toma de conciencia sobre sus implicaciones económicas, políticas, sociales y ecológicas. Seleccionando los indicadores para el diagnostico ambiental en un ente económico.